La relación humana de los niños en el mundo actual
La relación humana de los niños en el mundo actual
A los niños la gracia les conmueve y la belleza les atrae. En el planeta viven mil 983 millones de niños y niñas de 0 a 14 años. El cariño de un niño tiene el prodigio de curar el alma, son poseedores de una energía impresionante. El amor que emana de un niño, especialmente en sus primeros cinco años nos deja imborrables recuerdos. En navidad, verlos jugar y dañar carros, trenes, barcos, cajas musicales. No es el destrozo lo que les anima, es el querer entender cómo funciona, qué es lo que tiene de mágico, por eso a sus tempranos ocho meses ya están con la travesura de los celulares, laptos y lo que esté al alcance de sus manitas, para jugar y van creciendo con una nueva tecnología, luego desarmarán, armarán y construirán robots, ya hemos conocido algunos casos de pequeños genios. Por algo Jesús el Cristo expresara a uno de sus discípulos: “Dejad que los niños vengan a mí.”
Algo puntual que nos preocupa, son los niños, ellos están acostumbrados a reunirse con sus hermanos, primos, vecinos para jugar y compartir y otros momentos al llegar a la escuela esperando el anhelado recreo para socializar con los compañeros escolares y expresar la intensa alegría que los caracteriza. Ahora con esta educación virtual, la escuela la tenemos en casa, lo cual constituye una tarea muy complicada. Los psicólogos, recomiendan establecer cuándo jugar y estudiar, además de mantener sus horarios normales para comer e irse a la cama.
Profesionales en sociología educativa manifiestan que deben ser comprensivos con sus hijos, hablarles del tema lo más preciso posible y aprovechar el tiempo juntos durante la cuarentena. Los padres tienen que ver las noticias aparte, no con los hijos porque los niños pueden mal interpretar una información. Este tiempo en casa, les va a ayudar a socializar con los padres y hermanos.
LOS NIÑOS NO DEBEN PERDER LA RUTINA, bajo este principio, los expertos recomiendan una metodología muy sencilla que los padres pueden emplear para realizar las actividades adecuadas para que sus hijos estudien de manera eficaz en casa: 1.- Clasificar temas de acuerdo con su dificultad. 2.- Establecer un horario estricto de estudio (horas asignadas a descansar, alimentar, de ocio, repaso de apuntes). 3.- Intervalos de 25 minutos para estudiar cada materia. 4.-Descansar cinco minutos cuando terminen cada materia.
Además, de mantener las rutinas habituales en la medida posible, se recomienda que los padres deben ponerlos a estudiar poco a poco para no provocarles ansiedad o causar hartazgo. Esto se puede lograr al poner a los niños durante el primer día a repasar unos 15 minutos, y al siguiente aumentar el tiempo o las materias a estudiar; hacerlo gradualmente funciona para crear un hábito.
La diversión no es ajena al aprendizaje, la mejor manera para que los niños conozcan el mundo que los rodea y desarrollen habilidades es jugar. Las actividades como dibujar, tocar un instrumento musical, armar rompecabezas, colorear mandalas, y otros entretenimientos ayudan a fortalecer su memoria y tener rapidez mental.
HABLAR CON LOS NIÑOS, la doctora Lydia Hernández López, psicóloga especializada en terapia infantil, señala que hay que platicar con los niños sobre lo que conocen del coronavirus, a partir de esto, brindarles información clara de la situación actual y cómo pueden evitar contraer la enfermedad por medio de un lenguaje acorde a su edad, pero sin alarmarlos ni mencionarles información que pueda provocar estrés y miedo. Los niños son sabios.
EL 1 DE JUNIO RECORDAMOS EL DÍA DEL NIÑO
Estar en casa por varias semanas puede llevar a los niños a momentos de ansiedad o estrés al no tener el mismo nivel de actividad que habitualmente desempeñan; sin embargo, hablar con ellos a diario sobre cómo se sienten y acompañarlos es fundamental para mantenerlos seguros y contentos.
AYUDAR A LOS NIÑOS EN TIEMPOS DIFÍCILES
Unicef considera que: “esos momentos cotidianos que comparten los niños y niñas y los adultos pueden servir para resolver problemas mutuos. En tiempos difíciles e inciertos, el simple hecho de hallar consuelo en el otro constituye el primer paso para ayudar a los niños y niñas a adaptarse a la situación y a salir adelante”. En los niños habita un ser angélico, maravilloso y misterioso. Es en realidad la única etapa feliz de la existencia, con abrazos, besos y caricias, donde todo es ilusión y alegría.
GUAYAQUIL
Por: Fernando Naranjo-Villacís
fnaranjo@gye.satnet.net