¿REDUCCIÓN O CAMBIO DE BUROCRATAS?
Por: Holguer Mariano Jara
“Ley de eficiencia económica”. El escudo y fusil para cumplir el objetivo del gobierno, despedir 5 mil empleados públicos, aunque nada de esto se ha hecho de manera reflexiva o cuidadosa. Esta delicada y dolorosa acción es una estrategia de tala y quema.
El recorte de personal, es una decisión difícil que toma el gobierno en respuesta a diversos factores económicos o estratégicos. El recorte no siempre es directo y su modalidad varía mucho según la razón por la que el Estado decidió ir por esta vía llena de barrancos.
¿La medida es parte de un plan para reducir el exceso burocrático y erradicar los focos de la “ideología Política” concentrada en la burocracia o para cambiar de burócratas afines al actual gobierno? La escala de los despidos no está clara, puede degenerar la economía de un vasto sector de compatriotas. Recordemos que Correa despidió a decenas de miles de empleados a pretexto de renuncia voluntaria.
¿Porqué, no despiden a “médicos y profesores cubanos” que impuso el correísmo y pipones familiares de los políticos? ¿por qué no reducen personal de la asamblea nacional, prefecturas, alcaldías, gobernaciones, embajadas y consulados llenos de pipones?
Mientras gran parte de la atención del gobierno se centra en la disrupción de la burocracia, el extenso empeño para reducir la fuerza laboral del gobierno afecta a una franja mucho más amplia de trabajadores, quienes a su vez responden con ira y confusión.
Trabajadores que se desempeñan en diversas áreas de las instituciones públicas ecuatorianas, se han organizado, no sólo para pedir que cesen los despidos masivos y mantengan o recuperen sus empleos, sino que estos sean “dignos” y obedezcan al respeto de los derechos humanos a partir de los laborales.
Según el gobierno, la reducción agresiva de empleados públicos, es para “ahorrar unos pocos millones de dólares anuales, reducir el dormitorio político y brindar una mejor atención a los usuarios”, tesis que no comparto en lo más mínimo.
Por el otro lado de la quebrada, se suman miles de ecuatorianos que están siendo deportados o regresan voluntariamente de Estados Unidos y que seguro no tienen empleo, trabajo o una posibilidad de obtener un sueldo y centenares de miles de compatriotas que están en la desocupación por mucho tiempo y conviven entre la pobreza y la miseria.
Estoy de acuerdo con el objetivo de hacer que el Estado y las instituciones públicas sea más eficientes, pero no comparto el enfoque aleatorio e indiscriminado que se está implementando. El gobierno de Daniel Noboa, bajó las persianas a la burocracia “dorada”, así se confirmó la peor noticia, despidos con o sin razón, ahora esperemos resultados