Frank Cali, asesinado en N.Y.
Asesinado a tiros en N.Y., el jefe mafioso Frank Cali, el líder de la familia Gambino
La escena habría podido formar parte de una película de Hollywood: de noche en una calle de un barrio acomodado de Nueva York suenan varios disparos seguidos del ruido de un vehículo que se aleja del lugar de forma apresurada
Allí quedó desangrándose Francesco Cali, de 53 años, señalado como jefe de la familia Gambino, uno de los cinco clanes mafiosos de origen italiano que operan en la ciudad desde 1931.
También conocido con Frank Cali o Franky Boy, Cali fue atacado frente a su vivienda en el distrito de Todt Hill en Staten Island, a poca distancia de la residencia cuya fachada fue utilizada para representar la mansión de Don Corleone en la famosa película El Padrino.
El capo, de 53 años, recibió al menos seis disparos en el pecho. Los Gambino llegaron a ser considerados la mayor organización criminal de Estados Unidos
Hacía más de tres décadas que no se vivía una escena así en Nueva York. El miércoles pasado, Francesco Cali, un conocido capo de la familia Gambino, fue asesinado a balazos frente su domicilio, donde se encontraba su familia. Los vecinos del tranquilo barrio de Hilltop Terrace, pese a ser conocido por la influencia de la mafia, no se esperaban un crimen así.
El tiroteo tuvo lugar cerca de las 21.30 (hora local). Cali, de 53 años, fue trasladado al hospital donde certificaron su muerte, había recibido seis disparos en el pecho. La mañana del pasado jueves, la policía de Nueva York seguía buscando el arma y al sospechoso que cometió el crimen.
Algunos testigos confirman que este fue arrollado por una camioneta azul tipo pick up que se dio a la fuga.
En 2008, Frank Boy, como se le conocía, fue arrestado y cumplió una pena de 16 meses por extorsión.
En esa operación —que corrió a cargo de la Policía Antimafia italiana, en Sicilia, y de la Oficina Federal de Investigación (FBI) en Nueva York— fueron detenidas 77 personas tanto en la isla italiana como en la ciudad estadounidense, incluidos los responsables de los clanes italoestadounidense Gambino e Inzellino.
La familia Gambino, una de las cinco que integran la Cosa Nostra en Nueva York, llegó a ser considerada la mayor organización criminal de Estados Unidos: se dedicó a todo tipo de actividades delictivas hasta su caída en desgracia a mediados de la década de los noventa por los golpes de las autoridades.
Cuando Paul Castellano, su líder, fue asesinado en 1985, el clan contaba con más de 300 miembros, 2.000 socios e intereses en la industria textil, la retirada de basura, la construcción y los préstamos ilegales.
El tiroteo frente al restaurante Sparks Steakhouse en Manhattan en el que murió Castello es el último suceso de estas características que se recordaba en Nueva York. Ese asesinato lo ordenó John Gotti en su afán por tomar el poder de la organización.
Gotti fue detenido a finales de 1990 gracias a la colaboración con el FBI de su segundo al mando, Salvatore Gravano, una relación que provocó la caída de varios capos hasta que en 1992 fue condenado por cinco cargos de asesinato, evasión de impuestos, extorsión, juego ilegal así como por asociación para delinquir. Murió en prisión en 2002.
El encarcelamiento y la muerte de Gotti y de otros líderes marcó el inicio de un cierto declive de la familia Gambino, que llegó a ser considerada como el mayor grupo de crimen organizado de Estados Unidos.
.Esta conexión también fue perjudicial para los Gambino, ya que con el tiempo provocó la pérdida de gran parte de su poder. La figura de su nuevo jefe atrajo a la prensa y, en consecuencia, investigaciones judiciales.
UN ASCENSO RÁPIDO
Se cree que Cali se puso al frente del clan en 2015, cuando sustituyó a Domenico Cefalu.
Su estilo era más bien discreto, lo que contrastaba con otros capos como Gotti, quien era apodado «Dapper Don» (Elegante Don) -por su gusto por vestir trajes costosos y sus extravagantes entrevistas con la prensa- y bajo cuyo mando la familia ganó centenares de millones de dólares al año.
Cali escaló rápidamente en la estructura de la familia Gambino, donde se convirtió en soldado -un miembro iniciado u «hombre de honor»- a finales de la década de 1990 para luego ser ascendido a capodecina -una suerte de oficial de medio rango- en menos de diez años, según dijo el fiscal Joey Lipton durante una audiencia por un caso de extorsión en 2008.
Según reseñó The New York Times, en una corte de Brooklyn, Lipton hizo referencia a los «vínculos familiares y de sangre» de Cali con la familia Gambino, así como su «relación muy cercana» con John D. D’Amico, conocido como «Jackie», quien era el jefe de la familia en 2005.
Cali, nacido en Nueva York, era hijo de padres sicilianos, oriundos de Palermo. Las autoridades estadounidenses e italianas le consideraban como un miembro de la Cosa Nostra.
Estaba casado con Rosaria Inzerillo, quien era prima de Tommy Gambino. Ella pertenecía a la familia Inzerillo, que huyó a Estados Unidos en la década de 1980, tras perder una guerra con clanes rivales en Sicilia. Otro elemento que explicaría su rápido ascenso en la jerarquía.
No se conoce el número exacto de miembros en la familia. El FBI estima que en el país hay unos 3.000 miembros y asociados a grupos de crimen organizado italoestadounidenses.
¿RESURGE LA MAFIA EN NUEVA YORK?
Para las generaciones más jóvenes, sucesos como la muerte de Cali eran propios de series de televisión o de películas de Hollywood no algo que puede ocurrir en la vida real de forma abierta.
Pero, ¿qué dice este asesinato sobre la situación de la mafia en Nueva York?
Es un suceso muy significativo y muestra que la mafia italoestadounidense aún está activa,
Genovese, Gambino, Lucchese, Colombo y Bonanno son los nombres de las cinco mafias familiares que según se cree controlaron durante décadas el crimen organizado en Nueva York.
Estos clanes llegaron a ser alguna vez muy poderosos, ejerciendo influencia sobre políticos estatales y federales, y controlando parcialmente sectores de la industria del entretenimiento. Sin embargo, una serie de condenas y deserciones importantes en las décadas de 1980 y 1990 golpearon con fuerza su liderazgo.
Después de los ataques del 11 de septiembre de 2001, el FBI cambió completamente su foco hacia el tema del terrorismo, lo que hizo que algunos grupos de trabajo sobre crimen organizado redujeran su número de agentes de 400 a solo 20 o 30. Cuando no tienes personal, no vas a conseguir las acusaciones o las condenas, hacían las reflexiones, los jefes de la policía.
Hasta donde se sabe, Cali solamente había sido condenado en una ocasión, en 2008, por una acusación de conspirar para cometer extorsión por la cual estuvo preso 16 meses.
En 2011, el FBI arrestó a más de 100 personas acusadas de pertenecer a la mafia, incluyendo al supuesto jefe de las operaciones de calle de la familia Colombo.
Aunque entonces se dijo que era la detención más grande en la historia del FBI, el jefe de la oficina de Nueva York de esa organización reconoció que haber condenado varias veces a los jefes de las cinco familias no había erradicado el problema y aseguró que la creencia de que el crimen organizado había sido derrotado era un «mito».
«Las Cinco Familias están mucho más felices de lo que estaban en el pasado», y aseguró que están estableciendo lazos con los carteles de la droga de México y Colombia, así como con la ’Ndrangheta, la poderosa mafia que opera en la región de Calabria (Italia).
Los grupos de crimen organizado están cambiando las rutas de envío de drogas y de dinero e, incluso, tomando el control de algunas operaciones en Estados Unidos.Este cambio en el poder puede explicar esta muerte ahora», apuntó.
Hasta el jueves al mediodía, la policía no había ofrecido una explicación de lo ocurrido.
«Su muerte demuestra que estaba activo y que obviamente estaba molestando a alguien», señaló el Jefe de Policía de Long Island
Por Carmen Arboleda
Directora General de Ecuador News
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