DIFAMACION LABORAL

por Ecuador News · 1 mayo, 2019

Por Luis Lobato I

Como una acotación a «Contratos Colectivos Negativos», publicado por Ecuador News, edición 970 Abril 4-10 2018, es pertinente anotarla , debido a la respuesta poco convincente a mi solicitud dirigida al Abgdo. Rafael Caicedo SaverioDirector Regional del Trabajo y Servicio Público de Guayaquil—en Enero 29, 2016 en relación a mi despido arbitrario e injustificado en ausencia de mi «Abgdo. Defensor»donde para justificar un «Veredicto» me señalaron como «Es un Elemento Negativo” . La respuesta, siete meses después en Agosto 04,2016, fue: «Se procedió a la eliminación de documentos desde los años 1980 al 2005 portal razón no se encuentra archivado la información solicitada». Al día siguiente, Agosto 05, 2016 por escrito les manifesté mi inconformidad con esa respuesta, porque la demanda y el «Veredicto» fue en 1979. Para mejor comprensión del lector, permitanme copiar el texto de mi solicitud:

En la documentación adjunta, aspiro lograr borrar una mancha difamante a mi carrera laboral, estigmatizada como «Es un Elemento Negativo», según versión empresarial unilateral, leida en la Subdirección del Trabajo del Litoral, luego de haber sido despedido sin razón en Enero 10,1979. Difamación que pesa e influye en la inclinación mental egoista del ser humano, máximo si es expresada por un militar de alta jerarquia, en tiempos de dictadura.

Cometí «el delito», previa solicitud del Comité de Empresa y Sindicato de los Trabajadores de MACISA, de realizar un análisis al Sistema de Reparto de Utilidades según el Contrato Colectivo, en relación al Código del Trabajo, vigente en 1978.

Análisis en el cual se determinó un perjuicio económico contra la mayoría de trabajadores y a favor de Jefes Departamentales y otros empleados con remuneraciones superiores; puesto que, según el Contrato Colectivo por utilidades se pagaba cuatro sueldos al año, en contraposición a lo estipulado en el Código del Trabajo: El total de utilidades dividido para el número de trabajadores.

Despido injustificado, por lo cual demande, pero mi Abgdo. «defensor» supuestamente sufrio un accidente y no se presentó, el día preciso del «veredicto» en la Subdirección del trabajo del Litoral. Este «poder» de violencia patronal busca connotación de humillación o sometimiento; ejerce presión con el tiempo de desempleo y la necesidad, y asi automáticamente se bloquean las puertas de otras empresas privadas para ni siquiera revisar las aplicaciones. Razón por la que debí tocar puertas en el Sector Público de Quito, donde nací.

Reitero, no solo aspiro borrar tal difamación en mi contra, de estigmatizarme como «Es un Elemento Negativo!», sino también en despertar consciencia entre empresarios y abogados «defensores» del daño psicológico que ocasionan a un empleado al senalarlo , para despedirlo sin pruebas legales suficientes ni competentes. (Fin del texto).

Previamente, el Presidente de Macisa—capitan retirado e hijo del Gerente General y propietario, quien era coronel retirado también—me llamó a su despacho e inició un interrogatorio de mas de una hora. Primero, diplomaticamente me felicitó por mi Reporte de Reparto de Utilidades «tan preciso!» e inició: «Usted que es para el Dr. Juan Isacc Lobato? Le contesté: «Desconozco». El referido Dr. había sido Ministro Plenipotenciario o Canciller del Ecuador en Rusia y también al parecer fue «comunista» Quizás por eso mi interlocutor me asociaba como comunista, puesto que muchos empresarios privados señalaban como tales a quienes defendían los derechos de los trabajadores en los 70.

Otra pregunta: «Porque Ud. defiende a muchos que vienen a calendar el puesto?» Le respondí «Eso le compete solucionar al Subgerente Administrative Financiero, porque que culpa tienen quienes por 10 o 15 años de servicio solo están metiendo y sacando tarjetas del Kardex?». En base a mi respuesta, el ingeniero comercial Luis Duvacheli—Subgerente Administrativo Financiero , presento un Formato de «Análisis de Puestos» para disfrazar el inicio de una presión administrativa en mi contra o justificar de alguna forma lo que ganaba por su cargo; y quién sabe si el mismo planteo un complot para comprar la conciencia de mi «Abgdo. Defensor»que con su ausencia hizo posible realizar el proceso del «Veredicto», el cual debió suspenderse o postergarse, si es verdad que mi Abgdo. Defensor sufrió un «Accidente» (Me enseño en silla de ruedas una pierna enyesada, apenado por no haber podido pesentarse al «Veredicto. Clave mis ojos en el yeso y me pareció no haber lesión alguna, y le dije: «Eduardo, no te preocupes, peores cosas se pierden en la vida!»)

Luis Duvacheli en coodinación con el Contador General y talvez con la venía de los Jefes Departamentales de Hierro, Sanitarios y Ferretería, ejercieron mds presión para despedirme arbitrariamente después de nueve años de servicio profesional en el Dpto. De Contabilidad, donde el propio Presidente me presentó una vez concluida una entrevista de trabajo, en Sep.06 de 1971. Mi «Abgdo. Defensor» e ingeniero comercial, Eduardo Beltran Velazquez quien tenía su oficina jurídica en 6 de Marzo 629 y Luque , primer piso present mi demanda laboral en 1979. El día del «Veredicto» brilló con su ausencia, dejándome a merced de dos abogados, el Subgerente extranjero y el Contador General ingeniero comercial Otton Rivadeneira Toledo.

Cabe enfatizar que durante un año la Empresa Privada me cerro las puertas por esa referencia unilateral en mi contra. Sin embargo, como alguien dijo: «La persistencia es una virtud, entre tú y tus objetivos. El fracaso, no es una opción, amigo!».
Busque trabajo en el Sector Público, donde el Dr.Hugo Ordoñez Espinosa, Contralor General del Estado Ecuatoriano, firmó mi nombramiento como Auditor Interno Gubernamental en la ENAC, luego de mi participación en el Concurso de Merecimientos reglamentario de Recursos humanos, vigente desde Enero 01 de 1980.

Antes y después del infame despido de MACISA, hay otros efectos colaterales que por falta de espacio me reservo el derecho de expresarlos en otra oportunidad, y agradezco a Ecuador News por su sentido de Libertad de Expresión.