El vicepresidente Mike Pence pudo anunciar finalmente poco después de las 3:40 a.m. de hoy, hora de Washington DC, que Joe Biden había ganado la presidencia, después de que el Congreso completara el conteo de los votos de los Colegios Electorales.
Poco después, el mandatario Donald Trump emitió una declaración diciendo que, si bien “está totalmente en desacuerdo con el resultado de las elecciones y los hechos me dan la razón, habrá una transición ordenada el 20 de enero”, citó CBS News.
Lo que se consideró en gran parte como un último paso meramente formal antes de la toma de posesión de Biden el 20 de enero, se había convertido ayer en una tarde de caos que dejó al menos cuatro personas muertas y pedidos de destituir a Trump, después de que una multitud de sus seguidores, tras escuchar su discurso en la Casa Blanca, irrumpiera en el Capitolio en un esfuerzo por detener el proceso de conteo de votos.
“El Congreso que validó la victoria de Biden no era el mismo que se había reunido catorce horas antes para empezar a contar los votos electorales de cada estado en los comicios de noviembre, como demostraron los destrozos en la sede de la Cámara de Representantes”, acotó EFE.
Después de casi cuatro horas del asalto de los seguidores de Trump, que marcharon hacia el Congreso incitados por el propio presidente saliente, los legisladores de ambos partidos consideraron importante retomar anoche mismo la sesión que interrumpió la inaudita insurrección en Washington.
“A quienes desataron hoy (miércoles) el caos en nuestro Capitolio: ustedes no han ganado. La violencia nunca gana”, afirmó el vicepresidente saliente, Mike Pence, cuando se reanudó la sesión conjunta de ambas cámaras, a última hora del miércoles.
Más tarde Trump distribuyó un comunicado en el que se comprometía a “una transición ordenada el 20 de enero”, cuando Biden llegará al poder, aunque volvió a mostrarse “totalmente en desacuerdo con el resultado de las elecciones”.
La declaración de Trump, publicada en Twitter no en su cuenta habitual, sino en la de su asesor de comunicaciones Dan Scavino, fue probablemente lo más cerca que estará el mandatario saliente de reconocer la derrota en las elecciones, algo que ha prometido a sus seguidores que “nunca” hará.