La pasión de vivir
La pasión de vivir
GUAYAQUIL
Fernando Héctor Naranjo Villacís
Ahora que es- tamos más tiempo en casa con nuestros seres queridos, es preciso adaptar nuestra agenda anímica a esta nueva realidad. Crear un pequeño jardín en el balcón de nuestra casa, para sembrar y cultivar serenidad que nos ayudará a fortalecer nuestra energía interior.
NUESTRO ESTADO DE ÁNIMO es lo fundamental, debemos mantenernos aleja-dos de las malas noticias que nos desmoralizan. Al estar serenos, podemos enfrentar con desenvoltura los retos de la vida diaria.
Bien sabemos que cada día es diferente, nos llega con sus propias sorpresas. Al sentir el desarrollo de mi biorritmo, me queda una clara idea para cumplir con mis actividades. A las seis de la mañana ya estoy despierto, con mi estiramiento como hacen los gatos y el baño matinal seguido de un sostenido desayuno. Luego me toca revisar y desarrollar los planes previstos hasta la una de la tarde en que se puede disfrutar del adecuado rendimiento. Llega el momento de almorzar, platicar en la sobre-mesa, posterior una pequeña siesta que a veces se prolonga y el resto es tiempo libre.
De esta manera no caemos en la trampa del Estrés, que debemos observarlo con mucho cuidado, pues constituye la causa de muchas enfermedades que se pueden convertir en catastróficas.
Claro está, en toda planificación, hay que dejar una consideración para los imprevistos, porque somos seres creativos y en el momento menos pensado surge una idea, hay que anotarla, desarrollarla y ponerla a funcionar.
ES ALTAMENTE GRA-TIFICANTE, tomar contacto telefónico con familiares o amigos, especialmente si a quienes llamamos forman parte de la edad dorada. Una llamada constituye un alimento espiritual. Cuánta alegría por el intercambio de saludos, anécdotas y tantos recuerdos que se prolongan. Se han dado casos de prolongadas pláticas con amenidad que genera mutua alegría. Esto que puede parecer de poca importancia es en realidad muy vital. Algo que genera serios problemas emocionales es la soledad, esta simple llamada puede convertirse en terapia sanadora al desconectar de la tristeza que produce estar solo o sola. Una querida amiga escribió un mensaje en Facebook: “Estoy esperando que llegue el momento de hacer realidad tantos abrazos virtuales que los tengo archivados en mi celular.” No es posible acostumbrarse a tantos abrazos que van a parar a la nube, es pre-ciso que sean presenciales, intensos y cálidos.
UN RITUAL RESPIRA-TORIO, es de gran ayuda para mantenernos prevenidos. El oxígeno, es el alimento principal del cerebro y nos ayuda a fortalecer nuestros pulmones. He aprovechado los momentos de lluvia, para ir al balcón y sentarme cara a cara con tan placentero instante. Es tanto lo que podemos no solo mirar, ir un poco más allá, observar y luego llegar al espléndido encuentro de la contemplación. Allí la lluvia. Tiene un significado poético, maravilloso. Ver las palomas en su vuelo que parecería un ballet aéreo, El canto de los pája-ros. Las luces de los carros y semáforos reflejados en el pavimento. Ya en el atardecer el cielo nos emociona con una gama de intensos colores, con el sol que no quiere abandonarnos y nos regala sus últimos reflejos con bellos matices. Esta lluvia tiene su parte romántica, porque en la Plaza Rocafuerte al pie de la iglesia San Francisco, cobijado enuno de los portales se destaca la magia de un artista con su saxo, deleitando a los transeúntes con bellas melodías que se escuchan con nitidez gracias al efecto acústico del sector, despejado y rodeado de árboles, piletas de aguas saltarinas y armoniosos colores.
SON MOMENTOS DERELAJACIÓN, que debe-mos apreciarlos, ayudan a mantener nuestra estabilidad interior para evitar el fatal estrés y estimular la pasión para vivir con serenidad y optimismo.
fnaranjo@gye.satnet.net
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