Aseguró que la decisión del gobierno anterior de liquidar la empresa de trenes, considerado un bien productivo, “está siendo utilizado por opositores con fines políticos“, que “quieren engañar” al país.
A través de un hilo, Olsen explicó que en mayo del 2020, el gobierno anterior decidió cerrar las operaciones luego de 11 años de “registrar pérdidas por $144 millones y varios escándalos de corrupción como la compra de durmientes por $10 millones que se pudrieron en 3 años”.
Agregó que “cuando la empresa se declara en liquidación, se quedó sin dinero para cubrir sus pasivos (ej. sueldos, jubilaciones, deudas a proveedores, etc) por lo que inició la venta de activos no productivos. ¿Cuáles son estos? Desde resmas de papel y cartuchos de impresoras hasta terrenos sin uso.
Además asegura que con el Ministro de Obras Públicas Marcelo Cabrera, continúan buscando inversionistas locales e internacionales para formar una Alianza Pública Privada, “que otorga la operación y administración del bien público por X años, a cambio de la rehabilitación completa de la vía férrea. Terminado el contrato, los bienes regresan al Estado. No se privatizan ni se pierden. Esto genera empleos y garantiza una operación sostenible”. Enfatizó.