Polémica visita de Presidente Cubano Díaz-Canel a México
Polémica visita de Presidente Cubano Díaz-Canel a México, Fue Invitado por López Obrador al desfile de la Revolución mexicana
El gobernante cubano Miguel Díaz Canel llegó a México en la mañana del jueves pasado para participar en la conmemoración de la independencia de ese país tras una controversial invitación del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador.
La polémica visita a México del gobernante cubano Miguel Díaz-Canel, quien llegó como invitado de honor para participar en los festejos por la independencia de ese país, ilustra los retos que tiene el gobierno de Estados Unidos para sumar apoyo a su política hacia Cuba.
Sentado junto al presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, Díaz-Canel participó en un desfile militar para marcar la fecha y dio un discurso en el que aprovechó para denunciar el embargo estadounidense y una supuesta campaña de desinformación en contra de su gobierno.
“La decisión de invitarnos tiene un valor inconmensurablemente mayor en momentos en que sufrimos los embates de una guerra multidimensional, con un bloqueo criminal recrudecido oportunistamente,” dijo. “Estamos enfrentando paralelamente, una agresiva campaña de odio, desinformación, manipulación y mentiras montadas sobre las más diversas plataformas digitales, que desconoce todos los límites éticos.”
Las autoridades de la isla emitieron un decreto recientemente que convierte en delito criticar al gobierno en las redes sociales.
Por su parte, López Obrador volvió a pedir a Estados Unidos que elimine “el bloqueo contra Cuba, porque ningún Estado tiene derecho a someter a otro pueblo, a otro país.” También pidió a los cubanoamericanos que dejen a un lado “intereses partidistas” y busquen la reconciliación.
El destacado papel otorgado a Díaz-Canel ha llamado la atención en Washington, “porque parece ser un esfuerzo por conferir legitimidad a un líder del que otros están manteniendo intencionalmente su distancia”, dijo el exdiplomático estadounidense Eric Farnsworth, vicepresidente del Council of the America
Una portavoz del Departamento de Estado estadounidense no dijo si el gobierno de Biden le había pedido al gobierno mexicano que abordara las violaciones de derechos humanos en Cuba, pero dijo que Estados Unidos estaba comprometido “a continuar trabajando con nuestro socio democrático, México, para abordar todos los problemas urgentes en la región”.
“Es importante para la comunidad internacional en su conjunto hablar en apoyo del pueblo cubano, condenar la represión del gobierno cubano contra los manifestantes pacíficos y pedir al gobierno cubano que respete los derechos humanos y las libertades fundamentales del pueblo cubano”, dijo la funcionaria.
La invitación del presidente mexicano al líder cubano ha generado críticas entre la oposición mexicana y cubanos dentro y fuera de la isla, quienes han recordado su rol en la represión de las protestas antigubernamentales que sacudieron la isla en julio, por solamente un día.
“Es inaceptable el protagonismo en las fiestas del bicentenario de la consumación de la independencia de un presidente que encierra a decenas de ciudadanos cubanos,” publicó en Twitter el ex-presidente mexicano Felipe Calderón, conocido extremista de derecha
“Coma y váyase,” dijo a Díaz-Canel la senadora del Partido Acción Nacional Lilly Téllez, en una referencia a una frase del ex presidente Vicente Fox para pedirle al fallecido Fidel Castro que saliera de México tras participar en la Cumbre de las Américas en el 2002.
Pero el clima político no es el mismo y López Obrador, quien representa a Morena, una formación partidista de izquierda, ha utilizado el tema cubano para enfatizar la reivindicación de la soberanía como uno de los ejes de su gobierno. Farnsworth cree que la invitación a Díaz-Canel es “probablemente menos un ‘mensaje’ para Washington que una expresión de las inclinaciones personales del presidente, y también una forma de ofrecer algo a la izquierda política de México para mantener la libertad de acción del gobierno en relación a la economía nacional”.
Pero todo el asunto es otro ejemplo de los obstáculos que enfrenta Estados Unidos para conseguir un mayor apoyo en la región en las denuncias del récord de derechos humanos del régimen cubano, uno de los objetivos de la política exterior del gobierno de Biden.
“La administración comprende que no puede contar con México, ni con muchos otros países latinoamericanos, para unirse a Estados Unidos para presionar al régimen cubano para que mejore su historial de derechos humanos,” comentó Michael Shifter, presidente de Inter-American Dialogue, una organización con sede en Washington. “Esa es la triste y lamentable realidad de la política interamericana de hoy”.
Biden también fue invitado a la conmemoración pero envió al secretario de Estado Antony Blinken en su lugar.
“Para [Lopez–Obrador] los principios de no intervención y protección de la soberanía nacional priman sobre todo lo demás, al menos retóricamente,” dijo Shifter. “Para la administración Biden, esto es muy decepcionante y frustrante, pero es una realidad con la que tiene que lidiar y, obviamente, con México en particular hay muchos otros intereses fundamentales de Estados Unidos en juego que deben sopesarse”.
Aunque López-Obrador ha colaborado con las políticas migratorias de las administraciones de Trump y Biden, las fricciones entre México y Estados Unidos se han hecho sentir en otros temas, como el apoyo a Cuba y las críticas a la Organización de Estados Americanos.
“Consterna que López Obrador opaque el día del Grito de Dolores al invitar al colgas de Raúl Castro a las celebraciones de las fiestas patrias en México,” tuitió el senador de la Florida Marco Rubio.
Al anunciar que Díaz-Canel sería un “invitado de honor”, López Obrador recalcó que su país tenía “relaciones de amistad con el pueblo de Cuba desde hace muchísimo tiempo.” Un día después de las manifestaciones antigubernamentales en la isla, el presidente mexicano había pedido el fin del embargo comercial estadounidense a la isla.
“La verdad es que, si se quisiera ayudar a Cuba, lo primero que se debería hacer es suspender el bloqueo a Cuba como lo están solicitando la mayoría de los países del mundo. Eso sería un gesto verdaderamente humanitario. Ningún país del mundo debe ser cercado, bloqueado; eso es lo más contrario que puede haber a los derechos humanos”, dijo.
Además de reunirse con su homólogo mexicano, Díaz-Canel participará el sábado en la Sexta Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, que debe discutir la propuesta de López Obrador de sustituir la OEA por un “organismo autónomo”, en una referencia al rol de Estados Unidos en esa organización.
El gobernante cubano viajó a México acompañado del general Luis Alberto Rodríguez-López Calleja, el ex yerno de Raúl Castro que controla el conglomerado de empresas militares GAESA y quien está bajo sanciones estadounidenses. López-Calleja fue identificado en la prensa estatal cubana como “asesor del presidente”.
El viaje a México da a Díaz-Canel una oportunidad de mostrar que su gobierno no está aislado pese a las críticas de la comunidad internacional a la represión desatada contra los que protestaron en julio. Toda una comitiva, encabezada por Raúl Castro, varios generales y funcionarios fueron a despedir a Díaz-Canel al aeropuerto, lo que indica la importancia del viaje para la diplomacia cubana.
“En el día del Grito De Dolores, fiesta patria de México, es un honor llegar a la entrañable tierra azteca, a la que tanto debe, ama y respeta Cuba,” escribió en Twitter Díaz-Canel. “Hoy estaremos acompañando las festividades por su independencia. Viva México.”
ACTUALIDAD
Por Nora Gómez Torres,
Desde México, en especial para Ecuador News
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