Elecciones seccionales 2023
Como van a realizarse en el 2023 las elecciones seccionales en que se elegirán alcaldes, prefectos y otros
Los escenarios que afrontan el PSC, Pachakutik, CREO y la Revolución Ciudadana luego de los resultados de las elecciones presidenciales
Un músculo electoral débil para algunos y fortalecido para otros. Las elecciones presidenciales y legislativas de 2021 dejaron un camino lastrado para varias organizaciones políticas que vieron fortalecida su presencia electoral nacional y ahora pisan con fuerza con miras a los comicios seccionales del 2023. Aunque no todas gozan de ese panorama algo favorable.
La división de la Asamblea Nacional, un eventual reflejo de los Concejos Cantonales
Dejando claro que el electorado piensa de manera distinta al momento de escoger a sus dignidades nacionales y locales, este próximo proceso electoral al que camina el país para dentro un poco más de un año, puede convertirse en un espejo de cómo quedaron las organizaciones políticas luego de las generales de 2021. ¿Golpeadas? ¿Disminuidas? ¿Fortalecidas? Y el camino así como la meta son cruciales para llegar a una conclusión. Este primero es el que, de momento, se puede analizar porque algunas organizaciones ya mueven sus fichas para alcanzar las anheladas prefecturas, alcaldías, concejalías rurales y urbanas, así como las juntas parroquiales.
La división de la Asamblea Nacional, un eventual reflejo de los Concejos Cantonales
El método de asignación de escaños favorece a las minorías, fragmentando a los cuerpos colegiados. En los distritos pequeños suelen ganar los partidos grandes
Un panorama que se ve venir. Las reformas al Código de la Democracia vigentes a partir de las elecciones pasadas dan sus frutos. El método de asignación de escaños cambió y ahora se aplica solo el de Webster, que favorece a las organizaciones políticas pequeñas, y sus consecuencias ahora se ven reflejadas en la Asamblea Nacional.
Fuerza Compromiso Social desaparece y ahora se llama Revolución Ciudadana
División. Fragmentación. Pugnas. Es lo que ha marcado los primeros cuatro meses del Legislativo. Y eso se debe, en parte, a que el método de asignación de escaños pintó de varios colores las 137 curules de la Asamblea, pero ninguna tendencia es suficientemente predominante para crear un ambiente de estabilidad. Es un escenario que podría reflejarse en los Concejos Cantonales del país cuando se aplique el mismo método en los comicios de 2023, concluye la analista política y electoral Dayana León. “Podemos tener un escenario similar en los Concejos Cantonales en la medida en que el método incluya a las minorías, hace una proporcionalidad y va hacia la pluralidad política. Como lo que vemos que pasa en la Asamblea Nacional”.
La conformación de mayorías móviles que se van dando en función de los acuerdos políticos se puede dar cuando no existe un compromiso más que intereses particulares.
Y este panorama se vuelve aún más concreto cuando desde ya, a más de un año de la elección seccional, ya aparecen precandidatos a alcaldes en algunas ciudades sin un proceso de unidad a la vista.
El jurista Víctor Rivadeneira considera que la proporcionalidad entre votos y asignación de escaños en un país con tantos partidos políticos puede significar un reparto del pastel igual de plural, lo que “impide que haya una gobernabilidad”. Es por ello que cree que el Código de la Democracia debe ser estricto en cuanto al número de partidos y candidatos, pero su análisis va más allá.
La proporcionalidad de los votos actualmente no se ve fielmente reflejada en la asignación de los escaños. Esto quiere decir que continúa la desproporcionalidad.
Víctor Rivadeneira,
El jurista Víctor Rivadeneira, demandó la inconstitucionalidad ante la Corte Constitucional de la división de circunscripciones electorales pequeñas, por considerarla violatoria al principio de proporcionalidad electoral. Explica que la aplicación del método de Webster en distritos pequeños favorece a los partidos con mayor número de votos. Por eso su planteamiento es que se aplique la misma fórmula de asignación, pero en distritos grandes. “Que sea fiel la representación política. Si un partido político tiene el apoyo del 60 % de los ecuatorianos, que tenga el 60 % de representantes en la Asamblea, no el 100 %”.
Jonathan Parra, excandidato a asambleísta, no cuestiona el método de asignación, sino la eventual falta de compromiso de quienes integren un cuerpo colegiado frente al plan o proyecto de trabajo por el que votó la mayoría. “La gobernabilidad siempre dependerá de la autoridad electa y lo explico: si sus propuestas son de progreso y bienestar para el pueblo, pues contará con el apoyo de la mayoría; y el que no se sume a estas e incluso haga oposición, el pueblo sabrá juzgarlo”.
Debemos fortalecer, más que métodos de elección, los valores y principios en la nueva clase política y de ahí la importancia de la formación en los partidos y movimientos, sin crear caudillos o ídolos.
Jonathan Parra, excandidato a asambleísta. Fuerza Compromiso Social desaparece y ahora se llama Revolución Ciudadana
El 28 de agosto los dirigentes de esta organización política se reunieron en Manabí y aprobaron algunas reformas a su régimen orgánico.
El Consejo Nacional Electoral aprobó este 17 de septiembre de 2021 el cambio del nombre del movimiento Fuerza Compromiso Social (FCS), Listas 5, a Movimiento Político Revolución Ciudadana.
También, se modificó el símbolo que desde agosto de 2016 había usado FCS que fue fundado por el exministro Iván Espinel,
Ahora, la identificación tendrá una antorcha sobre las siglas RC en colores rojo “que simboliza el fuego, el calor la revolución, la pasión” y el cyan “que nos transmite tranquilidad”, según la solicitud presentada por la presidenta del movimiento, Marcela Aguiñaga.
Marcela Aguiñaga: “Si los números son positivos, estaré en la papeleta del 2023”
No es la primera vez que el correísmo buscaba adoptar el nombre de Revolución Ciudadana. En 2018, el CNE ya negó esa posibilidad, porque la expresión era usada y relacionada entonces con el movimiento Alianza PAIS (AP).
Sin embargo, ese mismo año AP aprobó las reformas a su régimen orgánico entre las cuales decidió eliminar el emblema y la denominación de “Revolución Ciudadana” de todas de todas las instancias de base.
El correísmo se reunió en Montecristi, Manabí, el 28 de agosto pasado para elegir a sus nuevos dirigentes y aprobar la moción, por unanimidad, del cambio de nombre y símbolos, pero manteniendo el número.
También, se decidió que el Movimiento Político Revolución Ciudadana tendrá su domicilio en la ciudad de Guayaquil.
Candidata única a presidenta del movimiento Revolución Ciudadana. Asambleísta en dos periodos consecutivos. En el primero fue segunda vicepresidenta de la Asamblea Nacional y en el segundo presidió la Comisión de Justicia. Marcela Aguiñaga es la máxima directora de esta nueva organización
El movimiento Revolución Ciudadana, otrora Fuerza Compromiso Social, instaló su convención en Montecristi en agoso pasado para ratificar la elección de Marcela Aguiñaga como presidenta y, entre otras decisiones, el cambio de nombre, de colores y eslogan de la organización que acoge a los simpatizantes del correísmo.
ENTREVISTA A ABOGADA MARCELA AGUIÑAGA PESIDENTA DEL PARTIDO REVOLUCIÓN CIUDADANA
– ¿Ya piensan en candidatos para las seccionales?
– Luego de pasar esta reforma estatutaria vamos hacia una reestructura en las provincias. Y posterior a esto vamos a seleccionar a nuestros posibles mejores cuadros. Adicionalmente estamos viendo dónde podemos y dónde no correr con alianzas.
– ¿Y la veremos en la papeleta?
– Me mediré como cuadro. Ahora estoy enfocada en la presidencia de la organización y posteriormente veremos mis números. Y si los números son positivos, estaré en la papeleta electoral.
– ¿Para la Alcaldía de Guayaquil o la Prefectura del Guayas?
– Eso lo decidiremos (según) dónde están las mejores posibilidades de tener una victoria.
– Una posible candidatura pese a señalamientos de glosas abiertas en Contraloría…
– En mi caso no tengo abierta una glosa en Contraloría. Tengo una glosa que está impugnada en la vía jurisdiccional en el Contencioso Administrativo de Guayaquil. Estoy para sentencia. De mis exfuncionarios, como la viceministra Mercy Borbor, quien firmó la escritura de compraventa (de los terrenos del parque Samanes entre el Ministerio del Ambiente y el Issfa), la justicia le dio la razón de que no hay perjuicio al Estado. Esperamos que la glosa sea desvanecida en virtud de que se ha demostrado que el dinero está en las arcas fiscales.
Es importante que redefinamos nuestra estrategia para captar un voto menos ideológico y más de causas.
– ¿Entonces no cree que eso manche una candidatura?
– Eso es parte de lo que se demostró en su momento, que la Contraloría se usó como un arma persecutoria. Recordemos que a mí el señor (Pablo) Celi (excontralor subrogante) es quien me puso la glosa… Habrá detractores como siempre.
– El caudal electoral del correísmo se ha visto mermado en los últimos procesos electorales. De 100, a 74 asambleístas y ahora 49. Y de tener varias prefecturas, a perder algunas, como la de Guayas, además de varias alcaldías en capitales provinciales. Casos como Sobornos, Odebrecht y otros les han pasado factura. ¿Cómo dejar esa sombra?
– Ciertos medios de comunicación, no todos, posicionaron, más allá de un caso particular, la lógica de que en los 10 años del Gobierno anterior existió corrupción. Eso caló en cierto segmento de la población, pero seguimos teniendo un voto duro muy marcado… Ese voto duro está a prueba de bala, pero hay que crecer en un electorado que aumenta.
– Hablemos de Guayaquil. La actual administración se ha visto envuelta en cuestionamientos e investigaciones fiscales. ¿Esto abona el terreno para que el correísmo llegue a la ansiada Alcaldía?
– Es importante que la investigación avance. La vemos detenida… Si algo ha hecho bien la alcaldesa (Cynthia Viteri) es el manejo de su comunicación. Está llegando a su electorado. Hay mucha tarea y no podemos seguir con el mismo modelo de hace 30 años.
Nuestro voto se ha movido. Es más costeño que de la Sierra ecuatoriana y trae una reflexión sobre Pichincha.
– Totalmente de acuerdo con que la justicia debe seguir su curso, pero coincidirá en que una cosa es la labor judicial y otra es el juicio de la ciudadanía. ¿Este último se puede capitalizar electoralmente?
– Haremos nuestras estrategias políticas, pero somos gente de bien. Lo que no nos gusta que nos hagan, como el uso indebido de la justicia, tampoco se lo deseamos a nuestros adversarios políticos… Hay cosas de fondo que no se resuelven, como el crecimiento de la ciudad, el abandono del centro, los problemas de basura, la alta contaminación, los problemas de las lagunas de oxidación.
– ¿Veremos a Rafael Correa haciendo campaña electoral?
– Rafael tiene un buen olfato de la política. Estará participando desde nuestra organización asesorando y liderando. Será consultado por mí siempre que lo necesite, en el caso de llegar a ser presidenta de nuestra organización.
POLÍTICA
Por Dr. Marcelo Arboleda Segovia
Editor en Jefe de Ecuador News
Para ver más noticias, descarga la Edición