Las ciudades más afectadas por el desabastecimiento de gas, durante las movilizaciones en el marco del paro nacional, fueron Ambato, Riobamba, Ibarra, Cuenca y Salcedo. Así lo informó la representante de ASOGAS, Laura Acuña. Además, explicó que la raíz del problema fue que el fluido para envasar no estaba llegando a ninguno de los 3 centros de abastecimiento a nivel nacional. Para poder distribuir el gas a la provincia de Pichincha se tuvo que traer los cilindros desde la base de Pifo, con un “40% de normalidad por falta de producto”, agregó.
Acuña precisó que “el resultado proporcional del desabastecimiento de gas llegó a un 70%”. Detalló que la imposibilidad de transportar los cilindros, sumado a la presencia de manifestantes en los exteriores de algunas de plantas, pararon por completo el funcionamiento. A los trabajadores “se les obligó a salir a la protesta” y a parar la maquinaria. Añadió que pudo “haberse dado una fuga de gas con dantescos problemas” ya que los protestantes lanzaban piedras hacia los gaseoductos.
La economista recalcó que “de ninguna manera se justifica la especulación de precios”. Esto ante las denuncias de ciudadanos a quienes se les llegó a cobrar hasta USD 20 por un cilindro, considerando que el precio en el local de distribución es $1,60 y $3 a domicilio. Además, este valor tiene un subsidio del 90% con relación a lo cuesta en el mercado internacional. “Lo que pagamos por el gas es un equivalente al 10% del precio real del mercado”, mencionó.
Acuña explicó que para llegar a la “normalidad hablamos de más de 1 semana”. “Eso no quiere decir que van a continuar las filas largas porque ya tenemos más producto”, aseguró.
