En el marco de la estrategia contra la violencia callejera, el estado de Nueva York ha aumentado la incautación de armas ilegales en cerca del 50 por ciento, según anunciaron este jueves las autoridades al tiempo de dar a conocer detalles del trabajo que desarrolla un equipo especial.
Bajo un operativo que llevó a cabo la nueva unidad de la Policía estatal (GTIU) contra el tráfico de armamento, sacaron de las calles 30 armas ilegales, incluidos seis rifles de asalto, siete cargadores de alta capacidad, doce pistolas fantasma y una variedad de piezas de armas fantasma.
El superintendente de la Policía Estatal, Kevin P. Bruen, informó en rueda de prensa que la investigación de meses de duración resultó en la ejecución de órdenes de allanamiento en múltiples ubicaciones en varios condados.
Aunque varias personas han sido arrestadas no se ofrecieron mayores detalles en este momento debido a procesos judiciales pendientes.
Por su parte, la gobernadora Kathy Hochul dijo: “Sabemos que se necesitan soluciones, pero se necesita tiempo y dedicación para ver los resultados”.
“A través de nuestro apoyo a la nueva Unidad de Interdicción de Tráfico de Armas de la Policía Estatal, nos enfocamos en investigar y llevar ante la justicia a quienes trafican armas al estado y las venden ilegalmente a otros delincuentes que tienen la intención de eludir la ley”, agregó.
La Policía Estatal GTIU se creó el verano pasado para atacar el tráfico de armas ilegales en Nueva York y lleva a cabo investigaciones complejas a largo plazo que se enfocan en mitigar la fuente de suministro. El objetivo de la GTIU, junto con otras agencias de aplicación de la ley que se asocian en las investigaciones, es reducir la posesión ilegal de armas y los delitos violentos que a menudo siguen.
“En lo que va del año, la Policía Estatal ha incautado 795 armas, un aumento del 104 por ciento en comparación con las 389 armas incautadas durante el mismo período del año pasado. En general, todas las agencias de aplicación de la ley en el estado informaron 3,166 incautaciones de armas en comparación con 2,181 durante el mismo período del año pasado, un incremento del 45 por ciento”, se indicó en un comunicado.
Sobre la ley de fianzas
Al ser consultada sobre el informe que presentaron el miércoles las autoridades de la Gran Manzana apuntando a las grietas del sistema penal por dejar sueltos a ciertos criminales, la gobernadora Kathy Hochul dijo: “Yo estoy de acuerdo en que esas personas reincidentes no debieron haber quedado libres”.
Sin embargo, la gobernadora no dio ningún indicio de si llamará a una sesión especial en Albany para revisar la ley sobre fianzas. “Yo también soy una persona impaciente, pero situaciones como esta necesitan tiempo”.
Hochul aseguró que ha hablado con el alcalde Eric Adams para brindarle el apoyo que se necesite en lo relacionado a seguridad ciudadana. “Le he dicho que si necesitan más oficiales estatales patrullando el metro para combatir el crimen allí estarán”.
Para la Administración Adams, los jueces deben tener la capacidad de mantener tras las rejas a los criminales violentos y de carrera en espera de juicio.
En cambio, los defensores de la Ley de Fianzas aseguran que existe un nivel de reincidencia muy bajo que no supera el 1% de los liberados en todo el estado.