Pérez Alcalá
Por Marco Antonio Rodríguez
Pequeño y menudo, vestía con sencillez, una boina cubría su cabeza y la barba gris merodeaba su rostro. Sus ojos sonreían, pero sus labios permanecían inmóviles. Solía llamar hermano o hermana apenas conocía a alguien, si es que su aguzada percepción de profeta emitía señales de que esa persona merecía ese nombre.
El arte plástico es histórico, como tal, es la contemplación de la verdad en la obra. La verdad es la esencia de la creación visual de Ricardo Pérez Alcalá (Bolivia, 1939-2013). Su arte incluye arquitectura, óleo, acuarela, dibujo… pero es su acuarela la que lo consagró en el mundo. Rememoro su “Leonardo da Vinci”: viaja el genio, pedaleando una bicicleta, vestido a la usanza de su tiempo, llevando sus proyectos casi todos inconclusos, entre ellos, quizás, “La Gioconda”, que no se sabe si existió. El esfumato, esa bruma prodigiosa inventada por Leonardo, vivificada por Pérez Alcalá, impide ver los ojos del genio, pero se siente su mirada febril y extraviada.
Luz y agua, el núcleo de la acuarela tradicional. Pérez Alcalá la tornó penumbrosa y desecada. Estampas de la cotidianidad de los excluidos por los sistemas de muerte que rigen en el mundo. “Antes del desayuno”: un camastro apoyado en una pared derruida muestra un esbozo lívido de Cristo de cabeza y un calendario, ambos consumidos. Sobre el camastro, algo sugiere un moribundo. Casas y techumbres mortecinas. Mercados destartalados con gente famélica. Habitantes de calles escombradas. Vacío. Soledad. Hambre. Los dolientes senderos del tiempo. Pérez Alcalá pugnaba contra lo que designaba “inhumanidad”. Perversión. Guerras. Codicia y sevicia. “Apocalipsis”: un animal, acorazado con metales hirvientes, semeja una máquina de guerra que revienta la tierra con sus pezuñas. El hocico de lava ardiente aniquila todo indicio de vida. Le pregunto si acaso pensó en nuestra extinción para que de allí comience otra especie que merezca el nombre de humanidad. Me miró, como siempre, sus ojos sonreídos.
OPINIÓN
Marco Antonio Rodríguez
Especial para Ecuador News
Para ver más noticias, descarga la Edición
