LA IMPORTANCIA DEL EJERCICIO
Poco o nada se conoce del creador del ejercicio para el cuerpo humano y su relevancia en cada uno de nosotros, ya que sin dudarlo, este contribuye de forma muy significativa nuestro desarrollo en la actividad que hagamos. Los especialistas en este tema tan elemental para nuestro organismo, nos dan una serie de recomendaciones que a veces pasan desapercibidas y no hacemos caso. Me atrevo a pensar que esto se da, cuando nuestros médicos o algunos de ellos están con sobrepeso, y recomiendan hacer ejercicio, siendo ellos quienes deben dar el ejemplo de buena salud.
Según los anales de la historia, se registra eventos en orden cronológico, cuando en las sociedades primitivas el ejercicio se encontraba vinculado a la supervivencia, pues para alimentarse tenían que cazar, como también para escapar de los fieros depredadores, requiriendo de un estado físico formidable, por así expresarlo. Más tarde podemos comprobar que un personaje muy reconocido como el “padre de la medicina, Hipócrates” (470 – 360 A.C.), quien sugirió o descubrió la importancia de la actividad física para mantener una buena salud. Además, tanto la cultura griega como la romana se destacaron con la creación de gimnasios, con el objeto de preparar principalmente a hombres para convertirlos en los gladiadores y soldados, disciplina hecha específicamente para combates, guerra y torneos. Ya en última instancia, el humanista del renacimiento como Gerolamo Mercuriale (1530 – 1606), vieron al ejercicio como parte vital de un equilibro entre la mente y el cuerpo humano.
Por lo dicho, es bien sabido que le corresponde a cada uno de nosotros, tener en cuenta o reflexionar de esta sugerencia y actitud a seguir; por cuanto de esto depende que nuestro cuerpo siga funcionando de forma normal y natural. El beneficio de practicar algún tipo de deporte, aunque sea en menor escala, a nuestro entender es muy reconfortante. He ahí tenemos el provecho físico (prevenir diabetes, hipertensión, problemas cardiovasculares); en otro aspecto está el fortalecimiento muscular, óseo, el aumento de energía, pues mejora la circulación y oxigena el cuerpo. Otra ganancia no menos significativo, es la reducción del stress, mayor concentración <incrementa mejor flujo de sangre al cerebro potenciando la memoria y la productividad>
El ejercicio es conveniente tomarlo como rutina diaria, comenzado paso a paso, conforme nuestro cuerpo lo resista, buscando la manera de ir adaptándolo a nuestro estilo de vida, pudiendo hacerla activa, divertida, constante y motivada ¡Qué va hacer algo tedioso! Lo sabemos, pero los resultados serán muy vivificantes, tu cuerpo lo agradecerá. Esto no es solamente para los adultos mayores, sino para todos los que pertenecemos o no a una comunidad determinada. De esta manera podemos estar mejor preparados para eventos futuros y en mejores condiciones de vida. ¡Sé que podemos hacerlo, y podemos empezar ahora, adelante!
Por: Dr. Manuel Díaz Córdova