La ‘joya de la corona del petróleo ecuatoriano, el campo Sacha, fue cedida a consorcio internacional

Mucha polémica ha causado la adjudicación del Campo Sacha, un lugar que es importante para Ecuador en su industria petrolera. El convenio se confirmará en 30 días.
Despachos combinados de Ecuador News
La ministra ecuatoriana de Energía y Minas, Inés Manzano, confirmó este lunes la adjudicación al consorcio internacional Sinopetrol de la operación del campo Sacha, catalogado como la ‘joya de la corona’ de la industria petrolera del país, aunque la funcionaria sostuvo que es una «corona oxidada».
«Mucho se ha dicho de Sacha que es la joya de la corona, pero lamento decirles que es una corona oxidada y que las joyas hay que pulirlas», indicó en una rueda de prensa en la que aclaró que entre la adjudicación y la firma del contrato aún hay «varias cosas que hacer», en un plazo de 30 días.
La firma se dará cuando se completen todos los trámites y la entrega de 1.500 millones de dólares por parte del consorcio, dijo Manzano después de que el fin de semana la Asamblea Nacional y la Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie) rechazaron versiones que circularon sobre la concesión del campo.
La ministra subrayó que «no es una concesión a privados, sino una delegación de operación y mantenimiento a un operador más eficiente a través de un contrato de participación», y recalcó que Sacha «no se privatiza, no se vende, no se alquila. La propiedad del recurso es y será del Estado ecuatoriano».
Lo que ocurrirá -agregó- es que el campo, operado hasta ahora por la empresa pública Petroecuador y «que tiene 50 años con falta de mantenimiento o mantenimiento no adecuado», será «operado con mayor eficiencia» por el consorcio.
La figura establecida por la ley es la delegación mediante asignación directa bajo la modalidad del contrato de participación.
Según Manzano, el campo tiene equipos con corrosión interna y externa; un sistema contra incendios debajo de las normas internacionales; presenta riesgos de catástrofes ambientales con más de 1.200 puntos de contaminación.
La ministra comentó que al delegar la operación del bloque Sacha, el país gana pues «son recursos que no están atados a ninguna deuda», los 1.500 millones de dólares, que es el valor de la prima, «se destinarán a obra social».
Elevar la producción
El nuevo consorció que operará el campo Sacha para aumentar la producción de crudo estará conformado, en un 60%, por Amodaimi Oil Company (subsidiaria de la estatal China Sinopec International Petroleun Exploration) y un 40% por Petrolia (filial de la canadiense New Stratus Energy), quienes le habían presentado al Gobierno del Ecuador, desde junio de 2024, una propuesta para hacerse cargo de la operación del campo Sacha, denominado también Bloque 60, a través de un contrato de participación con el Ministerio de Energía y Minas por un plazo de 20 años.
La idea fundamental es poder elevar la producción del campo de 75.000 a más de 100.000 barriles diarios y generar una inversión de US$1.750 millones en su modernización.
Esta concesión se da como consecuencia de que el campo ha venido perdiendo capacidad de producción debido al deterioro de una infraestructura que tiene medio siglo y que no ha podido ser modernizada por la crisis de corrupción por la que atraviesa Petroecuador desde hace varios años, empresa que opera el campo desde 1972.
A esto se suma que sobre el bloque hay 530 pasivos ambientales sin resolver y varias sentencias judiciales que han ordenado retirar los 90 “mecheros” que queman 18 millones de pies cúbicos de gas por día, causando serias afectaciones al medio ambiente.
Actualmente, la producción petrolera ecuatoriana se encuentra en 473.000 barriles diarios, a pesar de estar dentro de los cinco países con mayores reservas de Suramérica, muy lejos de los 560.000 barriles que se registraron en 2014.
Según se informó, dentro de las inversiones que tendrán que hacer el nuevo consorcio, está la de mejorar y modernizar todas las instalaciones del bloque, perforar nuevos pozos para elevar la producción y eliminar los quemadores a cambio de empezar a generar energía.
Empleos directos
Con esta nueva movida del gobierno de Noboa, se estima que el país podrá recuperar más de 370 millones de barriles de petróleo, cuyo beneficio recaerán en un 80 % en el Estado, en un contrato que “no está vendiendo, ni cediendo, ni traspasando la propiedad del recurso a un privado. Solo se está delegando su operación y mantenimiento”, advirtieron varios expertos. De hecho, este tipo de acuerdos ya ocurren en pozos como Auca o Shushufindi, entre otros.
El Estado recibirá, por parte del futuro consorcio, las utilidades del proyecto, ingresos tributarios provenientes del IVA y de la renta sobre sus inversiones, impuestos a la salida de divisas, costos y gastos, además de generar más de 1.000 empleos directos e indirectos adicionales, entre otros beneficios.
El Campo Sacha–Bloque 60 fue entregado en 2008 por el gobierno del entonces presidente, Rafael Correa, a la compañía Río Napo, de propiedad de Petroecuador y Pdvsa de Venezuela, pero tuvo que ser disuelta en 2016 frente al fracaso de su desarrollo y la falta de liquidez. Desde ese entonces, todos los gobiernos han intentado buscar un operador e inversionista extranjero para ese bloque, intención que se materializa ahora de la mano del nuevo consorcio.
Así que este anunció es un giro a la política de estatización que se venía dando dentro del sector de hidrocarburos en Ecuador desde el gobierno de Correa y que se tradujo en una reducción progresiva de la producción, en el aumento de los costos y mayores ineficiencias por parte de Petroecuador.
Leonidas Iza advierte que tratarán de evitar la concesión de Sacha
El excandidato presidencial y líder de la poderosa Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), Leonidas Iza, advirtió que adoptarán «todas las acciones necesarias» para evitar que el Gobierno de Daniel Noboa concrete la concesión del campo Sacha.
«El pueblo ecuatoriano no puede permitir que entre gallos y media noche y aprovechando un feriado, en plena campaña electoral y sin certeza sobre el próximo ganador, el gobierno saliente del presidente Noboa entregue directamente el campo petrolero Sacha (el más productivo del país) a una empresa privada», señaló Iza.
Agregó que «esta adjudicación, a solo tres meses de finalizar su mandato, es ilegítima. Por ello, tomaremos todas las acciones necesarias para frenar este intento de saqueo a la Patria. Ecuador es un país soberano que se respeta y NO ESTÁ EN VENTA», indicó Iza, quien en 2019 participó en la ola de protestas contra el Gobierno de Lenín Moreno (2017-2021) y lideró la de 2022 contra el Gobierno de Guillermo Lasso (2021-2023),
Iza quedó tercero, con 5,25 % de los votos, en las elecciones presidenciales del pasado 9 de febrero, en las que se definió el paso a segunda vuelta, el próximo 13 de abril, de Noboa (44,17 %), que busca la reelección y Luisa González (43,97 %), candidata del movimiento Revolución Ciudadana.
Campo Sacha es considerado una zona de alta producción petrolera en Ecuador.
La ministra de Energía y Minas, Inés Manzano, brinda la información a la prensa sobre la concesión del campo Sacha.
Se supone que los nuevos administradores harán d Sacha un campo muy productivo como siempre fue.