Despiden con sacrificios y tradiciones a Baltazar
El último hielero del Chimborazo es despedido por amigos y familiares en su comunidad
Bajo una carpa blanca como la nieve del Taita Chimborazo, y sobre la paja que utilizó durante más de sesenta años para hacer las sogas que le permitían amarrar los grandes bloques del apetecido hielo eterno, descansa el féretro de Baltazar Ushca Tenesaca, el último hielero del Chimborazo, quien falleció el 11 de octubre a causa de las lesiones que le causó la embestida de uno de sus animales.
Grandes arreglos florales de diferentes instituciones lo rodean, ya que Baltazar fue una de las figuras más icónicas y conocidas a nivel mundial de la provincia de Chimborazo, gracias a su sacrificada labor por preservar el oficio que le fue legado ancestralmente.
Su hija Carmita fue su más ferviente acompañante, no se separa del féretro y su esposo Juan, es el encargado de recibir a los visitantes , además es quien aprendió el oficio. Sobre él recae la titánica labor de seguir bajando los bloques de hielo como le enseñó el Taita Baltazar.
Cientos de personas se han hecho presentes. La noticia de su muerte ha sido retransmitida a nivel mundial por varios medios de comunicación. Hasta la capilla levantada en su humilde vivienda llegan personas que lo conocieron y quienes quieren ver por última vez a la leyenda.
“Yo lo conocí en el mercado, cuando dejaba bloques. Muy buena persona, humilde y alegre, por eso vine a despedirme”, manifestó Mariana Ausay.
Como manda la tradición y costumbres del pueblo Puruhá, su velatorio es una ceremonia que embarga muchos simbolismos. Inicia con el sacrificio del animal (toro) que causó las heridas a Baltazar. “Lo sacrificamos y será cocinado y convidado a todos los amigos, familiares y conocidos que vengan a acompañar y a despedir al Taita Baltazar”, indicó Elías Ushca, el único hijo varón del hielero.
Su velación se llevará a cabo durante tres días. Según su cosmovisión, serán tres días durante los cuales se realizarán los juegos tradicionales como el conejo y el matrimonio, que simbolizan la vida y las tareas que realizan las personas del campo. También se dará de comer a todos los que lleguen a presentar sus respetos.
“Mi papi era muy apegado a las tradiciones. Somos católicos, pero tenemos las costumbres que nos dejaron nuestros antepasados, así que se cumplirá todo lo que él quería”, añadió.
El sepelio se realizará el lunes 14 de octubre al mediodía. Se espera la presencia de cientos de personas, inclusive se prevé la presencia del artista Widinson, quien acompañó e hizo conocer a Baltazar a nivel nacional.
“Mi papi era pequeño, pero tenía un corazón gigante. Nunca dijo turistas o visitantes, todos eran amigos para él”, manifestó. Así mismo, dijo que no tiene cómo agradecer a todos quienes les han apoyado en estos tristes momentos.
Por: NotiMundo
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