LIBERTAD, NO ES SÓLO ESTAR LIBRE
Estoy enredado en la “comedia de las equivocaciones” y para salir de esta grave situación, tengo que obtener la Libertad, bonita palabra, pero significa mucho más.
La Libertad como palabra filosófica se suele emplear para designar la facultad que posee el ser humano, por naturaleza y nacimiento y nos permite decidir llevar a cabo o no, una determinada acción, según la inteligencia o voluntad.
Los políticos lo usan para cacarear en sus discursos tan baldíos como demagogos, el derecho, capacidad o habilidad que se atribuye al individuo para que ejerza la libre determinación de su pensamiento, como indiscutible expresión de su voluntad.
Queda claro que eso de la Libertad y el Libre Albedrío van cogidos de la mano, o al menos eso creía yo.
Nosotros vivimos en Ecuador, dentro de un Estado de Derecho. Tenemos obligaciones incrustadas en esos Derechos y sobre todo tenemos Derechos que se intercalan en esos mismos Derechos.
Y esto no es nada cómico, no. Es una verdad de Derecho. Me explico; Ecuador es un país que disfruta de una democracia demasiado inmadura, débil y manoseada, que nos justifica el cometer tantos errores y entre ellos uno de concepto, cuando se trata de explicar y aplicar lo que es la Libertad.
¡Hay Ecuador, no juguemos con lo único que nos queda a nosotros todavía humanizados ecuatorianos! No permitamos que nos conviertan en borregos los pastores que viven en el extranjero como refugiados o perseguidos políticos, llevados de la mano por politiqueros que están demostrando ser tan inútiles, aunque sean de la Liga Azúl, que no saben ponerse de acuerdo para formar un Gobierno estable, fuerte, legal, decente, honesto y sólo piensan en la corrupción y el bienestar personal o partidista.
Necesitamos un gobierno que se ocupe de dictar una Ley, sólo una, que les recuerde a los jueces, que son sólo eso: jueces, administradores objetivos de la Ley y la equitativa aplicación de la Justicia y no como viene ocurriendo hoy, que dejan libre a todo delincuente a cambio de mentiras, triquiñuelas y obviamente de dólares, mientras al honesto ciudadano le ponen tras las rejas sin formula objetiva de acusación y la Libertad viene pisoteada
Que la Libertad nunca sea la justificación de una demagogia barata al servicio de un político que hace politiquería sin importarle un bledo lo que el pueblo vive.
Necesitamos una Ley donde la Libertad sea tan libertad, que les enseñe lo que se permite en derecho y lo que se respeta por derecho. Y en cuanto a los políticos, que se vayan preparando y dando prisa, que la reconquista ecuatoriana ya comenzó con el nuevo país y con ella inmersa la Libertad del pueblo.
Por: Holguer Mariano Jara