Princesa Charlene de Mónaco, ingresada y aislada

Ingresada y aislada, en su cumpleaños más triste ha pasado la Princesa Charlene de Mónaco
La princesa cumple 44 años ingresada en una exclusiva y secreta clínica, donde se recupera de sus problemas de alta salud mental y locura….
No sabemos si Charlene de Mónaco habrá tenido ganas de soplar velas, ni siquiera si le han llevado una tarta para celebrar su 44 cumpleaños, pero lo cierto es que la princesa monegasca ha celebrado este martes el aniversario más triste de su vida: lejos de Montecarlo y de su familia, recluida en una exclusiva y secreta clínica suiza y sin contacto exterior desde que fuera ingresada el pasado mes de noviembre para recuperarse de sus problemas de salud mental.
Sin fiesta de cumpleaños ni regalos, Charlene ha recibido una felicitación virtual con un vídeo que el palacio de Mónaco ha subido esta mañana a sus redes.
El vídeo, firmado por la Fundación Princesa Charlène de Sudáfrica, muestra imágenes inéditas de su vida desde su niñez hasta ahora, fotos con sus padres en Sudáfrica, su etapa de nadadora de elite, con el príncipe Alberto y sus dos hijos, Jacques y Gabriella, que han cumplido 7 años.
«¡Feliz cumpleaños, princesa Charlène! Le honramos por lo mucho que siempre da de sí misma para cambiar las vidas de la gente de todo el mundo. Su pasión y dedicación para salvar y cambiar vidas es una verdadera inspiración. Confiamos en que este vídeo de su viaje hasta ahora le recuerde que es usted muy amada y apreciada», reza el texto de la Fundación que aparece junto a las imágenes.
CUAL ES EL SECRETO QUE RODEA EL MATRIMONIO A LA PRINCESA CHARLENE DESDE QUE SE CASÓ CON EL PRINCIPE ALBERTO DE MÓNACO?
El misterio rodea a Charlene desde que se casó con Alberto de Mónaco en 2011. No fue una novia resplandeciente, al revés, su rostro compungido y sus lágrimas dieron pie a titulares que la calificaron como «la novia más triste de la realezas Se.publicó incluso que había intentado huir y que fue interceptada en Niza unos días antes del enlace.
Su vida en Montecarlo también ha sido objeto de especulaciones y rumores por sus continuas ausencias y porque huía del protocolo siempre que podía.
Ni siquiera vive en el palacio, según algunos medios. «Nadie ignora que desde hace años Charlene comparte su tiempo entre el refugio provenzal de Roc Agel, regalo de Rainiero a Grace, una casa en Córcega que le prestan unos amigos, y escapadas de vacaciones a Turquía. Cuando está en Montecarlo no reside en el palacio, sino en el antiguo piso de la princesa Estefanía, que se ha puesto a su disposición»..
El aislamiento ha sido la manera de la antigua nadadora sudafricana de seguir siendo ella misma y no una réplica de Grace Kelly, su suegra, epítome del glamour del principado. Charlene no lleva bien la presión de los medios ni la vida protocolaria en Montecarlo hasta el punto de que ha caído enferma, como ha reconocido el propio Alberto. Tras permanecer ocho meses en Sudáfrica, víctima de una misteriosa infección, tiempo en el que se especuló con la separación de la pareja, Charlene volvió a Montecarlo, delgada y visiblemente desmejorada.
Unos días después se anunció que se retiraba temporalmente de la vida pública y que ingresaba en un centro no revelado para preservar su intimidad. Las especulaciones aumentaban y el príncipe Alberto se vio obligado a reconocer que la fatiga de su mujer «no es solo física». Se desconoce la ubicación del centro de reposo donde se encuentra Charlene pero varios medios han apuntado a que se trata de un lujoso establecimiento de Zurich. Su vuelta al principado sigue siendo una incógnita.
CHARLENE: EL MISTERIO DE LA PRINCESA
La polémica regia del año ha sido protagonizada por Charlene de Mónaco y sus enigmáticos problemas de salud. La princesa permaneció ocho meses en su tierra natal, Sudáfrica, aquejada oficialmente por una grave infección de oídos, nariz y garganta por la que los médicos le prohibieron viajar en avión. Su ausencia disparó los rumores sobre un posible divorcio de Alberto, que algunos medios dieron por seguro afirmándose incluso que Charlene buscaba casa De nada sirvió que el soberano monegasco viajara en verano a Sudáfrica para visitar a su esposa, con sus hijos, los mellizos Jacques y Gabriela, ni que la princesa, que estuvo ausente en julio en su décimo aniversario de bodas, dirigiera en las redes un amoroso mensaje a su marido: «Alberto es mi roca y mi fuerza, sin su amor no hubiera podido superar este doloroso momento»’
Hace unos pocos meses desapareció el Principe de Monaco por algunas semanas y un periodista le encontró con Nicole Coste (moreno con un pañuelo blanco, que hace unos 6 años era amantes, parece que este encuentro fue el comienzo de la enfermedad de Una lacrimógena Charlene el día de su boda con Alberto de Mónaco. Charlene al dares cuenta que su esposo regresaba a su pasado homosexual.
Por fin el 8 de noviembre Charlene regresaba al Principado y el palacio Grimaldi distribuía unas fotos del amoroso recibimiento de Alberto con un ramo de flores acompañado por sus hijos.
Se esperaba que Charlene, más delgada, se estrenara en la vida oficial del Principado participando en la fiesta nacional de Mónaco el día 19 de ese mes.
Pero no asistió. Y tampoco se reincorporó a los actos oficiales, pues según un comunicado del Principado, la princesa se retiraría temporalmente de la vida pública para recuperarse de sus problemas de salud.
Lo único que ha trascendido es que Charlene está ingresada en una clínica fuera de Mónaco, probablemente en los Alpes suizos, donde sigue recibiendo tratamiento y son las princesas Carolina y Estefanía, hermanas de Alberto, quienes están supliendo su ausencia de principes.
REALEZA
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