ASAMBLEISTAS AL TOMA Y DAME
Por: Holguer Mariano Jara
En aplicación al artículo 150 de la Ley Electoral, el número de asambleístas aumentó en Ecuador de 137 a 151. 15 nacionales, 6 del exterior y 130 provinciales. Los salarios que se pagan anualmente en la Asamblea Nacional pasarán de 21 a 23 millones de dólares.
El poder legislativo ecuatoriano, no solo es caro, sino también ineficiente, corrupto, manipulador e irrespetuoso de las leyes. Antes que el incremento de legisladores es necesario una reducción, incluidos sueldos y salarios, poniendo en práctica una verdadera austeridad económica.
Es evidente la ausencia de fiscalización, estudio y discusión del presupuesto y falta de contrapesos y vigilancia de los poderes, predominan las ambiciones partidistas y personales, convirtiendo a esta función del Estado en un circo político.
El 90% de las iniciativas que presentan los legisladores, están hechas para no ser aprobadas. El país no funciona con base en el número de asambleístas o iniciativas propuestas, sino por la funcionalidad de las normas o leyes que se concretan en beneficio del Ecuador.
Este 14 de mayo se escucharán ovaciones y reproches desde lo alto de la tribuna de la Asamblea Nacional, de militantes y simpatizantes de RC5 y ADN, seguramente serán sin destino cierto, porque políticamente están empatados y en realidad nadie sabe lo que buscan o quieren.
Tenemos una Asamblea partida por la mitad, sin timonel, a la deriva y en riesgo que un empujón “indígena” los desestabilice políticamente y se hundan en el mar de sus ambiciones, perjudicando a 18 millones de ecuatorianos.
Habrá un auditorio lleno de pasiones políticas, que reflejará con toda claridad lo que viene pasando en el país y cuya polarización mantiene divididos a los ecuatorianos entre quienes respaldan y quienes critican al presidente, pero también fustigan fuertemente a los asambleístas por su inercia, inoperancia y politiquería.
Los “honorables” legisladores se darán besos, abrazos y garrotazos en el próximo período ordinario que se inicia el 14 de mayo, en temas como: elección de Presidente, conformación de comisiones, reforma electoral, convocatoria a una Constituyente, reformas al código laboral, a la Justicia, a la eliminación del Consejo de Participación Ciudadana, rebaja de sueldos a los asambleístas y especialmente las trincas y amarres para obtener la mayoría.
Se inicia una maratón de promesas y ofertas, en otras palabras, tú me das, yo te doy, para llegar al matrimonio político llamado corrupción y como siempre vivirán en la misma casa, en cuartos separados, pero con un mismo objetivo, llenarse los bolsillos y pasar de legisladores a observadores, dejando en el olvido la esperanza del país y las necesidades del pueblo.