GOBIERNO LE INCENT/IVA AL PUEBLO ENTRE EL ESPLENDOR Y LA AMARGURA
Por Holguer Mariano Jara
A medida que la lucha contra la pandemia de la inseguridad continúa en el Ecuador, surgen nuevos desafíos: la crisis climática, la necesidad urgente de continuar los avances en la reducción de la pobreza, el constante desafío de un empleo digno, recuperación de la ética y moral, eliminación de los corruptos y mafias del narcotráfico, crimen organizado y recuperar las relaciones diplomáticas con México.
Para enfrentar el conflicto armado interno, la crisis social y económica, IVA al 15% a través del llamado allanamiento tácito. El Estado tiene una caja fiscal deficitaria, con millonarios atrasos y con mucha fortuna, podrá recaudar más o menos 1.000 millones de dólares.
Este conjunto de desafíos exige al Gobierno a encontrar maneras responsables de gastar una mayor cantidad de recursos, que siempre los pone el pueblo. La expansión del espacio fiscal se debe encarar con un aumento proporcional de los impuestos, muy cierto, la respuesta es el aumento del IVA al 15%.
El IVA es un impuesto aplicado al consumo que todos los contribuyentes en territorio nacional lo pagamos, lo que quiere decir, es un valor agregado a los servicios y productos que compramos por el simple hecho de que pasó por un proceso productivo, obteniendo como resultado un producto final.
Hay una enorme preocupación por la evolución que muestran los precios desde el productor hasta que llega al consumidor, no obstante, en dichos análisis más allá que existe una problemática empresarial, se está omitiendo que hay algunas cuestiones en las cuales el mayor o único perjudicado es el consumidor final, quien en definitiva termina soportando y pagando de su bolsillo el IVA.
Ese (extra) puede parecer poco dinero o no, pero si sumas todo lo que compras en un mes, es bastante lo que terminas gastando en IVA, un tributo que afecta directamente a tu bolsillo.
En la última semana hemos hablado mucho de este impuesto al consumo, que está golpeando especialmente a la gente común, en una nación ya afectada por una profunda crisis económica, estamos hablando de alzas de precios para los ciudadanos de a pie.
Es importante señalar que el aumento del IVA ha generado debates y preocupaciones en diversos sectores de la sociedad ecuatoriana. Mientras algunos temen que esta medida afecte negativamente el poder adquisitivo de la población más vulnerable, otros la consideran necesaria para garantizar la estabilidad económica y fiscal del país.
Los países que más pagan IVA son Uruguay 22%, Argentina 21% en Latinoamérica y los más bajos, Paraguay 10%, Panamá 7%, mientras Cuba no aplica este pago.
En aumento del IVA en Ecuador representa un cambio significativo en el panorama económico y fiscal. Si bien busca abordar los desafíos económicos y sociales, es crucial implementar políticas complementarias que minimicen sus posibles efectos adversos en la población más vulnerable y fomenten un crecimiento económico inclusivo y sostenible.
En el 2024, incluso con los impuestos temporales y el IVA, las necesidades de financiamiento están lejos de estar cubiertas y la situación de la caja pública sigue siendo critica. El próximo Presidente tendrá que avaluar si baja del 15% en el 2.026; pero ante la grave crisis fiscal no se ve probable. En los próximos años, la subida en los pagos de la deuda externa refinanciada en bonos complica aún más el panorama.
El Gobierno debe enfrentar consecuencias si los ciudadanos no creen que se están gastando bien sus impuestos, si sienten que no son tratados de manera justa por los funcionarios fiscales, si no se comunican de forma adecuada las leyes y decisiones tributarias y si el sistema impositivo no es equitativo. Hay cuatro factores que deben ser tomados en cuenta: Justicia, equidad, reciprocidad y rendición de cuentas, sólo así podrán ayudar a fomentar la creación de confianza en el sistema económico ecuatoriano.
El primer país que adoptó el IVA fue Francia en 1.954 y fue creado con el fin de combatir la crisis económica causada por la segunda guerra mundial.
En el proceso de financiar un creciente gasto público, especialmente cuando no se realiza en un contexto de creación de riqueza a través del crecimiento que aporte mayores recursos para el Estado, surge claramente una tensión, ya que se requiere reasignar recursos desde el sector privado hacia el público, por medio de uso de impuestos.
Estos impuestos, distorsionan y producen lamentablemente menos incentivos a trabajar, a acumular capital y generar ingresos, con el consecuente impacto negativo en el crecimiento, la inversión y en el empleo. Dado que los impuestos modifican los precios relativos de la economía, afectan las decisiones de todos los agentes de la sociedad, tanto de las personas como de las empresas, impactando su bienestar, es indispensable que el gobierno haga buen uso, de esos recursos.
El aumento del IVA si tendrá un impacto en la inflación como en el consumo; pero, según experiencias pasadas, ese impacto es menor de lo que se cree porque otros factores pesan más. En todo caso, este golpe al bolsillo de los ecuatorianos nos saca la cuchara de la boca, disminuye la precaria alimentación, debemos vestirnos más ligero y a pensar seriamente en ciertos caprichos, si queremos pasarlo bien.
OPINIÓN
Holguer Mariano Jara
Especial para Ecuador News
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